Reseña: Brújulas que buscan sonrisas perdidas


Espero que hayáis empezado bien las vacaciones ;). Hoy os traigo el libro "Brújulas que buscan sonrisas perdidas" de Albert Espinosa



Titulo: Brújulas que buscan sonrisas perdidas
Autor: Albert Espinosa
Nº de páginas: 240

Resumen:

Ekaitz está pasando por un mal momento, tiene que ir a cuidar de su padre, con el que nunca se ha llevado bien, ya que se lo prometió a su madre antes de morir, su padre sufre alzheimer y cáncer, el primero ha hecho que se olvide de su hijo, en este libro Ekaitz nos cuenta su relacióm con su padre y sus hermanos, la muerte de su esposa, y otras muchas cosas que le han convertido en lo que es ahora.

Resumen de detrás del libro:

Nunca dejaré de buscar mi archipiélago de sinceridad... ¿Quieres formar parte de él? «Jamás nos mentiremos... Escúchame bien, eso implica algo más que ser sincero... En este mundo mucha gente es falsa... Las mentiras te rodean... Saber que existe un archipiélago de personas que siempre te dirán la verdad vale mucho... Quiero que formes parte de mi archipiélago de sinceridad...» «Saber que puedes confiar en la otra persona, que nunca te mentirá, que siempre te dirá la verdad cuando se lo pidas, no tiene precio... Te hace sentir fuerte, muy poderoso...» «Y es que la verdad mueve mundos... La verdad te hace sentir feliz... La verdad creo que es lo único que importa...».

Opinión Personas:

Me ha encantado el libro, el tema en si no es muy largo ni muy enrevesado pero la forma de escribir del autor realmente me encanta, la forma de expresar los pensamientos y sentimientos del protagonista es increíble, te hace llegar a entender perfectamente como se siente cada personaje y ponerte en su situación.

Frases del libro:

-“Una vida, si tiene un buen discurso y unos buenos argumentos, puede tocar a cientos de otras...”

- “La gente es tan falsa… Desde hacía un año no creía a nadie. Paso algo y todos me dieron la espalda… No quiero decir que no estuvieron a mi lado, ahí estuvieron los primeros días, pero después desaparecieron…”

- “Aquello fue un regalo, vida que te retornan. Fue eso, vida que te retornan cuando ya pensabas que la habías perdido...”

- “Y ésa es la grandeza de estar en el pozo, que si lo deseas y la ayuda es sencilla, una simple indicación, leve pero acertada, te puede llegar a sacar de allí...”

- “Jamás nos mentiremos… Escúchame bien, eso implica algo más que ser sincero… En este mundo mucha gente es falsa… Las mentiras te rodean… Saber que existe un archipiélago de personas que siempre te dirán la verdad vale mucho… Quiero que formes parte de mi archipiélago de sinceridad”

- “Quizá ese es el sentido de la vida, todos somos ignorantes que ignoramos cosas diferentes hasta que desaparecemos… El conocer la verdad nos permite marchar”

- "No hay prisa cuando sale el sol en la mañana de una noche larga..."

- "Su muerte dejó muchas vidas sin rumbo... Le hubiera gustado saberlo, decía que una vida, si tiene un buen discurso y unos buenos argumentos, puede tocar a cientos de otras..."

- "Y si sales del mundo, puede que no vuelvas a entrar..."

- “Sigo pensando que los amores no correspondidos son la droga natural más potente de este mundo. Tanto de los que los sienten como de los que no los corresponden… Todos siempre acaban sufriendo, pero vuelven a caer en sus redes…Hay una épica difícil de explicar: se sufre, se intenta, se sufre, se prueba… ¿Qué te lleva a desear a alguien con tanto ahínco cuando sabes que no te quiere?”

- “¿Sabéis cuando los días y las noches se confunden?¿Cuando te metes en la cama y tienes la sensación de que es imposible que haya pasado otro día más?
Eso me ocurría noche tras noche, día tras día. Sentía que aquello no era vivir, era tan solo notar cómo el tiempo transcurría alrededor de mis biorritmos…”

- “Jamás sonreía cuando entraba a verla…El olor a medicamento y a habitación cerrada me ponía muy serio…y recuerdo que ella sonreía todavía más cuando me veía entrar así y me preguntaba justo en el instante en que yo me sentaba en su cama…
*¿Has perdido todas las sonrisas? Tengo una en el puño…
Y me mostraba el puño cerrado.
*Si quieres te la regalo…Abro el puño y la coges al vuelo…
Y ella abría el puño y yo sonreía…Era automático…
Pero yo enseguida dejaba de hacerlo y ella volvía a la carga.
*Tengo otro puño y en él hay una sonrisa de oreja a oreja…¿La quieres?
Y abría nuevamente el puño y yo sonreía de oreja a oreja…jamás le falló el truco….jamás le faltaban sonrisas en los puños…”

- “Siempre he creído que una persona que no permite que vean sus ojos siente mucho placer o mucho dolor… Y es que cuando los cierras completamente sólo puede significar que estás en tu propio mundo…Y los mundos propios suelen ser tan personales que necesitas que el exterior no te salpique”

- ( Esto más que una frase es una parte del libro que ha mi me gusto mucho)
Entré en la casa... La mujer que le cuidaba estaba en la puerta... Me advirtió que estaba peor que nunca... Le dije que podía ir a cuidar a los suyos... Yo me quedaría con él a partir de ese momento....
Ella no discutió, aceptó quizá demasiado rápido y se marchó ha hacer las maletas... Yo subí a su habitación...
Padre estaba gritando medio dormido... Tapado con una única sábana... Y, en ese instante, le conté la misma historia que él me contó hace tantos años...
"Hubo una vez un chico que no tenía amigos... Se sentía solo..."
Así comenzaba su historia... Cuando escuché aquello, no salí de debajo de la sábana. Él tampoco...
Proseguí...
"Pero un verano hizo un amigo, otro hijo único... Se parecían: la misma edad, el mismo corte de pelo, las mismas ganas de soñar..."
Recuerdo que en aquel instante, hace años, padre paralizó la historia y se encendió un puro. Yo iluminado con mi linterna y él con su puro...
"Aquellos dos niños se hicieron amigos enseguida... Se sintieron como hermanos que la casualidad había unido... Y cada día de aquel largo verano quedaban en una piscina de agua cristalina y allí se pasaban el día alejados de los padres..."
"Hasta que un día se contaron el gran secreto... ¿Sabes aquel gran secreto que todos poseemos pero que ocultamos?"
Recuerdo que cuando me contó aquello, yo no poseía ningún secreto y me quedé con cara pensativa intentando entender a qué se refería... Ahora noté que era padre quien lo hacía... No me detuve...
"Los dos querían volar, que le salieran alas para marcharse de allí, de aquella vida... Así que decidieron desearlo con fuerza y cada día, antes de meterse en la piscina, se quitaban la camiseta y miraban el reflejo de sus espaldas en busca de alas..."
"Cada uno miraba la espalda reflejada del otro, deseando que le hubiesen crecido..."
"Pero no había suerte, no había alas. Pero aquello no conseguía desilusionarlos, sabían que tarde o temprano las alas aparecerían."
"Así que cada día hacían lo mismo: levantarse a las ocho, ir a la piscina, quitarse la camiseta y mirar sus espaldas reflejadas en esa agua transparente..."
"Todo el verano lo pasaron igual. Una rutina preciosa que les hacía sentirse especiales..."
Y en aquel tiempo yo salí de mi sábana como padre hizo en ese mismo instante... Aquella historia nos enganchaba con al misma intensidad y en el mismo momento...
Continué con el desenlace...
Padre antes de contarme el fina, me explicó aquel día que él siempre buscaba finales que merecieran una historia... Cuando tenía un buen final, buscaba una historia...
Y en aquel final que me contó mi padre pasó del "él" al "yo"... Y supe que aquella historia era personal... O eso quise pensar...
"Y el último día de aquel verano, fui a buscar a mi amigo a su casa..."
"Y su casa tenía las persianas bajadas..."
"Llamé al timbre y nadie abrió, hasta que vi llegar a su madre de la calle y me dijo que mi amigo había sufrido un ataque al corazón y había muerto."
"No me lo podía creer. Empecé a llorar delante de su madre y no paré en todo el día..."
"Mi abuelo me vio y me preguntó qué me pasaba. Se lo expliqué todo y me dijo que no tenía que llorar, que mi amigo había conseguido su sueño. Por fin tenía sus alas, sus alas para volar..."
"Y delante de mi abuelo dejé de llorar."
"Y siempre que he recordado a mi amigo, he sonreído... Porque yo sabía la verdad, una verdad que si se la explicara al resto del mundo no me creerían y me tacharían de loco..."
"Pero muchas veces a partir de ese día, cuando he mirado a una piscina llena de agua hasta los bordes, si me acerco, me parece ver reflejado a mi amigo con sus alas, que me vigila y me protege..."
Cuando mi padre acabó la historia, mi cara era de alucinamiento... Él estaba feliz, sentí que le encantaba haberme enganchado...
Ahora era padre el que alucinaba, estaba llorando... No sé si aquello era parte de su infancia. No lo sé... No sé si aquel amigo suyo era en realidad su madre...
Cuando él acabó esa historia, recuerdo que me acerqué a él y le dije: "Te están a punto de salir", mientras le acariciaba la espalda...
Él sonrió, supongo que porque le había dado un final mejor...
Mi padre, después de contarle toda aquella historia antes explicada por él mismo, no dijo eso... Sino que pronunció unas palabra que yo no esperaba... Que me dejaron totalmente helado...
- Consígueme esas alas... No puedo más... Ayúdame a marchar, Ekaitz...
Había vuelto... Mi padre había vuelto... Pero el espejismo duró poco, justo después de pronunciar aquellas palabras se durmió...



Y con esto acabo, espero que si no la habéis leído ya lo hagáis en mi opinión es muy buena, ahora me he empezado el de " Si tu me dices ven lo dejo todo... pero dime ven" del mismo autor y por ahora me esta gustando, ya os informare cuando me lo acabe ;)

¿Qué opináis del libro? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por comentar! :)